Todas las mujeres soñamos con ser princesas. Este sueño esta amarrado con el deseo de ser
alguien importante, ser reconocidas, deseadas, amadas, apreciadas y
preferidas. Simplemente es el sueño de
ser alguien “especial”, eso es lo que en lo más profundo todas
deseamos ser. Nuestra meta es llegar a ser
especiales para alguien. Es un hecho, es que ninguna mujer quiere ser
cenicienta, no quiere ser la doncella,
siempre querrá ser la princesa. Pero
como en todo cuento de niñas, descubrimos que no valíamos lo que
deseábamos. Comúnmente nos asignamos el
valor que otros nos dan, nos cuesta trabajo
convencernos que valemos más que eso, que podemos ser transformadas de plebeyas a reinas en un instante. Darnos valor a sí mismas, es parte de ese
mismo deseo interno de ser reconocidas como alguien de valor. Una persona normal se auto-califica en base
a los estándares que ha aprendido y se asigna un auto-valor o auto-estima. Si has aprendido que tener dinero aumenta el
valor de tu vida, y tú no tienes suficiente, entonces crees que “vales
poco”. Si has aprendido que tener amigos y ser popular
da valor a tu vida, y tú tienes muchos, crees que “vales mucho”. El valor de nuestra vida siempre va a ser
muy relativo, según nuestros conceptos de la vida. Pero hay un descubrimiento que todas
necesitamos hacer, y es lo que sucede en
nuestra vida espiritual. La Biblia nos dice
en Apocalipsis 1:5-6 que nosotros hemos sido compradas con un precio muy
alto, que quizás nuestra vida no valía
mucho, según nosotras, pero Dios le dio
un valor tan alto, que pago con su
preciosa sangre. Cuando descubres esta
verdad espiritual, puedes esperar que todo lo demás se ordene en tu vida y
cobre valor. Tus emociones, tus relaciones, tu cuerpo físico y tu vida
sentimental cambian. Porque te
posicionas en una nueva perspectiva que
te permite ver el mundo desde otro ángulo.
Si sabes que vales tanto que Cristo dio su vida por ti, que además te compró para hacerte reina, eso cambia tu forma de ver las cosas
alrededor. Cambia tu forma de cómo te
sientes contigo misma, te cambia hasta la forma de hablar y de vestir. Porque sabes que eres muy valiosa para Dios,
porque descubres que Cristo al comprarnos
con su sangre nos hizo reinas para Dios. No hay vuelta atrás, eres sumamente
valiosa, no importa lo que piensen en tu
casa, no importa quienes más te quieran menospreciar, tú sabes quién eres y a quien le
perteneces. Es lo que yo llamo
“convicción de reina”, esta convicción
sucede en lo muy interno de una mujer, pero sale a luz en su forma de vivir y
enfrentar cada desafío en la vida. Hay una urgencia en la actualidad de reconocer
que somos linaje escogido, que somos
especiales y eso nos hace más asertivas en la vida, más humildes y más agradecidas. Vive bien, vive como escogida de Dios!
“Pero vosotros sois linaje escogido, real
sacerdocio, nación santa,
pueblo adquirido por Dios.”
1ª. Pedro 2:9
pueblo adquirido por Dios.”
1ª. Pedro 2:9
TE INVITAMOS A NUESTRO PROXIMO DESAYUNO:
Tema: Mujeres de Linaje Escogido
Fecha: Sábado 31 de octubre
2015
Hora: 8:00 AM
Lugar: Hotel Camino Real Antigua, 7a. calle poniente # 33B, La Antigua G. Conferencista: Dra. Elizabeth de Bocaletti
Hora: 8:00 AM
Lugar: Hotel Camino Real Antigua, 7a. calle poniente # 33B, La Antigua G. Conferencista: Dra. Elizabeth de Bocaletti
Costo: Q 55.00
NO TE LO
PIERDAS !!!